sábado


Sin Fecha fija

¡Vea la vaina! ¡pasó lo que tanto temía! ¿Por qué no me fui por la escalera?. He quedado atrapada! ¡Contra! ¡qué país éste en que siempre se va la luz! y no sé ni dónde está el timbre de alarma. ¡Qué oscuro está esto! Debí haberme fijado dónde estaba el timbre, me enseñaron a ser tan precavida, tan todo en su sitio, tan ordenada... y ahora.. Aquí está, este botón debe ser. ¡Esto sí que es oscuro! Nada, está dañado. ¿Qué tiene que ver el timbre con que la luz se vaya?, no , no puede ser. Presiona, una y otra vez, presiona, presiona todos los botones, uno, dos tres, no hay más. Total, eran tan pocos los pisos que tenía que bajar, mejor es la escalera y más en este país donde se va luz. ¡Dios!, no suena, y son las cinco de la tarde, y de viernes cultural. Todo está cerrado ya, ojalá y quede algún portero. Grita, golpea la puerta, duro, más duro. Hubiera dejado este trabajo para el lunes.

Siempre con la manía de estar al día, de no atrasarme nunca... No, no esto tiene que abrir, hace un calor infernal aquí dentro. Esto está tan oscuro y tan pequeño, parece una trampa. ¡Dios, no hay quien me oiga! grita, grita más desesperadamente, comienza a llorar. Hacia tanto tiempo que no lloraba. Ya no grita, aúlla, golpea la puerta, se lastima las manos, nadie pasa afuera, nadie oye, y esa oscuridad, esa oscuridad, esa oscuridad tan enorme, como el cuarto en que dormía cuando era niña y le tenía tanto miedo a los ruidos. Grita nuevamente, aúlla, brama gruñe. Esto es algo así como estar muerta, conscientemente muerta, el día de mi muerte. Cerraron la caja, y soy la que está allí, a lo largo, a lo ancho, esto le llaman pelar el bollo, y !tan buena que era!, si porque no hay muerto malo...


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Juicios críticos:

La novela en Panamá... se encuentra de plácemes con la aparcición de Sin fecha fija, escrita con hosnestidad y valor y con el interés de utilizar el lenguaje como método de conocimiento, de investigación y de exposición de una realliad que pocas veces ha sido expuesta en nuestra litaratura: la condición femenina.

Bertalicia Peralta
Tema de Hoy, La República 16 de marzo de 1983
La protagonista de Sin fecha fija resulta una heroína al revés porque su conducta conformista con los valores caducos, su impacto con el sistema que conspira contra la mujer para invalidarla en su humana esencia, hace que el lector se violente, cuestione, repudie todo lo que ela no se atrevión a cuestionar y repudiar. En realidad el personaje es un poco cada una de otras nosotras las que hemos concedido y seguimos concediendo; pero no queremos seguir siendo participes del juego absurdo que nos sofoca y nos niega.

Isabel Barragán de Turner
(La Antigua, Revista de la Universidad Santa María La Antigua, segundo semestre, 1982)