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:: RELIGION INCA

Religión Inca

Viracocha e Inti

Los dioses más importantes entre los incas son:

Inti: dios-sol, la divinidad principal que se adoraba en el Coricancha de Cuzco. Este dios tenía mucha importancia política porque los Sapan Inca afirmaban descender de Inti, lo cual les proporcionaba la reputación de un origen divino. En el coricancha había una estatua de Inti de oro. Representaba un niño pequeño sentado, con rayos solares saliendo de su cabeza y hombros, grandes pendientes en sus orejas, un pectoral y una diadema real. Esta estatua se llamaba Punchao. Los incas creían que el oro era sudor del sol. Según la ideología inca, estaban obligados a conquistar otras tierras para extender la religión de Inti y Viracocha. Una buena excusa.
Mama Quilla: la luna, esposa de Inti. Tenía su propio templo en Cuzco con sus propias sacerdotisas. Los incas creían que la plata eran las lágrimas de la luna
Viracocha: Era el dios creador, que había comenzado el Cosmos en el lago Titicaca. Cada tribu en los Andes tenía su propio mito de la creación, en el que la tribu en cuestión aparecía como el centro del Universo. Viracocha se representaba en forma humana, con rayos saliendo de su cabeza, serpientes alrededor de sus brazos y cabezas de jaguar saliéndole del pecho. Se suele relacionar con el dios de la puerta de Tiuhanaco. Pese a su importancia, Viracocha recibía poca atención de los incas.

Illapa, dios del trueno y dador de la lluvia. Muy reverenciado por su papel en la agricultura. Se le representaba como un hombre flotando en el cielo con una maza en una mano y una honda en la otra.
Pachamama: madre tierra relacionada con las huacas.

Pachacamac: “el hacedor de la tierra” un dios regional de la costa famoso por su oráculo, que tenía ya dos mil años de existencia en época del imperio inca. Era el dios de los terremotos.

En la región andina también existían cultos menores a otros planetas o estrellas. Las cimas de las montañas eran así mismo objeto de culto.

Acllacona o mamacona

Las Acllaconas o “vírgenes del sol”. Jóvenes escogidas a los quince años por su belleza y talento para convertirse en servidoras de la divinidad. Provenían de todo el imperio. Se encargaban del culto a Inti. Tenían cuatro años de noviciado (aprendían a cocinar, preparar chicha y tejer) Después, algunas eran seleccionadas para casarse con un noble, otras para servir en el templo. Cuando alcanzaban su madurez y dejaban de ser novicias eran llamadas mamaconas. Si rompían la regla de la castidad eran condenadas a muerte

Ceques, huacas y panacas

Las huacas eran lugares o piedras sagradas relacionados con la religión incaica, particularmente con el culto a los muertos. Los incas creían que sus antepasados, especialmente los héroes y líderes, nacían de la tierra y no morían sino que se transformaban en piedras o fuentes. Estos lugares mágicos de nacimiento y muerte eran las huacas. También había huacas (edificios, árboles, caminos...) que rememoraban acontecimientos importantes en la vida de los antepasados. Era necesario hacer ofrendas de comida, bebida y ropa a los muertos. En ocasiones se les hacían sacrificios humanos, con frecuencia niños pequeños, sobre todo cuando ocurría algún desastre natural. Parece que cada ayllu de Cuzco tenía sus huacas específicas. Se piensa que cada ciudad andina tenía su propio sistema de huacas.

Los ceques: Las huacas de Cuzco estaban organizadas en ceques. Los ceques eran líneas imaginarias concéntricas que salían del coricancha de Cuzco. Había cuarenta y un líneas. En estas líneas estaban 332 huacas.
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.Las panacas: ya hemos dicho que eran grupos de descendientes de un Sapan Inca.Formaban la élite entre los incas porque pertenecían a la familia real. Estaban consagrados a preservar la momia de su antecesor. Cada panaca tenía tierras y sirvientes llamados yanas. Las panacas se mantenían porque cada una tenía asignadas una serie de fincas en territorios conquistados que las proveían de comida, ropa y dinero a través de la venta de sus productos. Más allá del culto a las momias, las panacas eran el sistema social de la nobleza de Cuzco. Tenían grandes posesiones en donde trabajaban miles de campesinos yobreros. También tenían mucha influencia política para elegir al Sapán Inca. Por ejemplo, después de su victoria, Atahualpa deshizo la panaca de Huáscar y se apropió de sus tierras. Esta era una manera de quitarles todo el poder a los partidarios de su enemigo.


El calendario. Ceremonias incas

No sabemos con certeza cómo era el calendario inca. Los incas conocían perfectamente los ciclos del sol y de la luna y basaban sus festividades ceremoniales en los ciclos lunares, pero no hay información fidedigna sobre cómo corregían el desfase entre ciclo lunar y solar. Se especula que tenían doce meses de 30 días y hacían cambios en algunos meses para añadir los cinco días restantes. Las ceremonias más importantes de su calendario eran:
Capac Raymi: (Solsticio de verano en Diciembre) Era el primer festival del calendario y el más importante. En este festival tenía lugar la iniciación de los orejones jóvenes. Necesitaban subir y bajar a cuatro montañas en peregrinación. Por último había una carrera en que tenían que bajar la ladera de otra montaña con gran peligro de su vida. Durante estas ceremonias los jóvenes eran azotados en las manos y piernas. A los 21 días de ceremonia, a los nuevos orejones se les hacia un orificio en las orejas, como símbolo de su pertenencia a la clase noble. Los jóvenes que pasaban las pruebas recibían su nombre adulto (“Cóndor”, “Serpiente”, “Halcón”...) En el Capac Raymi había también ceremonias públicas donde se bailaba, se bebía y se comían pasteles de sangre de llama y de maíz que simbolizaban la comida del sol.

Inti Raymi: (Solsticio de invierno en Junio) Ceremonia de la ruptura de la tierra por el Sapán Inca. La población se reunía fuera de Cuzco antes del amanecer para celebrar la salida del sol. Se sacaban las momias de los anteriores emperadores guardadas y abanicadas por las mamaconas. Se cantaba al sol, se repartía comida y chicha, y se hacían sacrificios. La ceremonia continuaba por ocho o nueve días hasta que el Sapán Inca cogía una azada y abría ritualmente la tierra para indicar el comienzo del año agrícola.

Pese a sus conocimientos de astronomía, los incas no sabían predecir eclipses por lo que éstos eran considerados un augurio nefasto. Los incas creían también que los cometas anunciaban la muerte de un rey. Sendos cometas aparecieron en el cielo poco antes de las muertes de Huayna Capac y de Atahualpa.

Sacrificios entre los incas

Los incas hacían sacrificios humanos, aunque con mucha menor frecuencia que los aztecas. Normalmente sacrificaban llamas blancas a Inti y marrones a Viracocha. También ofrecían conejillos de indias, comida, ropa y chicha a las huacas. Había dos tipos de sacrificios humanos: los Itu, con ocasión de grandes desastres naturales para apaciguar a los dioses, y los Capac Ucha, dedicados a Inti, en donde niños provenientes de cada ciudad eran estrangulados en Cuzco. A otros se les sacaba el corazón y se mojaba con su sangre estatuas de Inti. También en la coronación o muerte del Sapán Inca se sacrificaban 200 niños de cuatro a diez años provenientes de todas partes del imperio. Mil niños fueron sacrificados en los funerales de Pachacutec. Los sacrificados eran emborrachados antes de ser enterrados vivos. También se afirma que 31 de las 332 huacas de Cuzco recibían sacrificios humanos, aunque sólo se han podido encontrar rastros de sacrificios en tres de ellas.

También había sacrificios de jóvenes que venían de las regiones recién conquistadas para ofrecer estas regiones a Inti..

Los incas eran muy supersticiosos y tenían muchos ritos de adivinación, especialmente con arañas. Por ejemplo: sacaban de una jarra una araña viva. Si la araña tenía una pata doblada, era un mal augurio.